Muchas veces son los pequeños detalles los que hacen la diferencia. Basta un pequeño error para convertir una obra de arte en algo mediocre, una realidad en un "quizás", un sobresaliente en "uno más del montón". Por lo general nos enfocamos tanto en "el todo" que perdemos de vista esos pequeños puntos que nos separan de la excelencia. Allí también hay que mirar, y buscar, y arreglar... Todo el esfuerzo es poco para lograr "perfecto" en vez de "OK"... pero bien vale la pena intentarlo.
Nunca antes nadie llegó a la cima sin dejarse antes la piel en el camino.
I like it (ur wife)
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